Según estudios la vejes es una enfermedad y puede curarse
Basándose en sus estudios de más de dos décadas, dice que es posible retrasar el envejecimiento con unos hábitos sencillos para que tengamos una vida más larga y saludable.
Sinclair cree que pronto será posible hacer esto también con medicamentos, que aún se están probando para este propósito, y dice que probablemente vayamos a lograr ser capaces de revertir el envejecimiento.
El científico, que tiene un doctorado por la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, y un posdoctorado del Instituto Tecnológico de Massachusetts, en Estados Unidos, está a cargo de un laboratorio en la Universidad de Harvard donde investiga por qué envejecemos.
Su trabajo le ha valido decenas de premios de asociaciones y entidades científicas. También lo convirtió en una celebridad: ha sido elegido una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Timey tiene casi 200.000 seguidores en Twitter. Es la activación y desactivación de los 20.000 genes de una célula lo que le dice a esta quién es —es decir, le da su identidad— y cómo se supone que debe funcionar.
Pero con el tiempo, el epigenoma comienza a perder información, como le ocurre a los CD por los rasguños, y las células pierden la capacidad de activar los genes correctos en el momento adecuado. Pierden su función.
Creo que esa es la razón por la que envejecemos.
No hay ninguna ley en biología que diga que debemos envejecer. No sabemos cómo detener esto, pero estamos mejorando para reducir la velocidad. Y, en el laboratorio, lo pudimos revertir (el proceso).
Mi punto es que el epigenoma es cambiante.
La forma en que vivimos nuestras vidas tiene un gran impacto en estos rayones en el CD. Hacer las cosas bien puede ralentizar drásticamente el envejecimiento del reloj, y hoy podemos medir ese reloj, tenemos análisis de sangre y saliva para eso.
Estamos encontrando en animales como ratas y ratones e incluso en ballenas y elefantes y en personas que tienen diferentes estilos de vida que el envejecimiento puede ocurrir a un ritmo muy diferente. Y que más del 80% de su salud futura depende de cómo viva, no del ADN.
Hay cosas que los científicos han descubierto al observar a personas que viven mucho tiempo. Estos incluyen comer los tipos correctos de alimentos (un buen lugar para comenzar sería la dieta mediterránea), comer menos calorías y con menos frecuencia. El ejercicio físico también ayuda.
Y hay quienes piensan que cambiar la temperatura corporal con hielo y agua fría es útil en este sentido.